Unos 50 guardias civiles y policías locales despliegan un operativo contra el cultivo y tráfico de cannabis en viviendas del casco antiguo
Vigilados desde el aire por drones y por el helicóptero ‘Cuco’, y cercados desde tierra por más de medio centenar de agentes de la Guardia Civil, los investigados lo tenían difícil para huir. A primera hora de la mañana, a las siete en punto, cuando la ciudad se despereza, efectivos del puesto de la Guardia Civil de Mula, auxiliados por la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic) de la Comandancia de Murcia y agentes de la Policía Local de Mula, comenzaron a tomar posiciones frente a las viviendas marcadas.
Las investigaciones y vigilancias realizadas por los guardias civiles permitieron averiguar que en esos domicilios, situados en el casco antiguo de Mula, algunos de ellos deshabitados, estaban siendo destinados, en apariencia, a albergar plantaciones de marihuana.
En las vigilancias averiguaron que las casas, algunas deshabitadas, estaban siendo destinadas, al parecer, a albergar plantaciones
Los efectivos constataron, además, que las casas eran visitadas regularmente por personas que presuntamente estarían efectuando labores de mantenimiento de los cultivos e identificaron a una veintena de sospechosos. Asimismo, comprobaron que los cultivos ‘indoor’ de droga implicaban enganches ilegales a la red principal, con el consiguiente fraude eléctrico que afectaba al suministro de los vecinos de la zona.
De este modo, las unidades de la Benemérita iniciaron el operativo en una actuación coordinada en trece registros de viviendas y en los trasteros, cocheras y anexos a cada inmueble pertenecientes a cada vivienda. En las inspecciones se incautaron centenares de plantas de marihuana y, al menos, hubo seis detenidos.
Material requisado
En concreto, la redada se desarrolló en el casco antiguo, en dos casas ubicadas en la calle Monjas; otra en Altos de Santo Domingo; en la calle Salitre; en Campillas; en dos inmuebles en Mizas; otras dos en calle Altos de Mizas; en calle Alta; calle Fuensoriana; y, las últimas dos viviendas, en la calle Molinos. Además de las plantaciones de marihuana, los efectivos requisaron aires acondicionados, focos, fertilizantes y material para el cultivo del cannabis.
El amplio dispositivo policial desplegado durante la jornada causó revuelo entre los vecinos
En la intervención, participaron también operarios de Iberdrola, que intervinieron en aquellas viviendas que obtenían la luz de forma ilegal. La actuación siguió durante la tarde con la retirada de las plantas de las viviendas. Las calles que comunican con los barrios donde se realizó la intervención permanecieron cortadas durante gran parte de la jornada y el amplio dispositivo desplegado causó revuelo y asombro entre los vecinos